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iarenzana |
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2011-05-24T21:01:00Z | 2097-01-23T19:09:00Z | https://arenzana.org/?p=45 | 45 | Lo que realmente importa | /2011/05/lo-que-realmente-importa/ |
He tardado varios años pero al final lo he comprendido. Siempre me han dicho que no soy el chaval más “avispao” de la clase y que tardaba en captar las cosas. Y en la vida es igual.
Tardé en darme cuenta de que el dinero estaba bien pero es como esas bolsas de patatas grandes que compras que, cuando las abres, realmente encuentras que están medio vacías y que, a pesar de la decepción, por algún motivo sigues comprando con la esperanza de que en esta ocasión esté llena. Y vuelve a decepcionarte.
Y poco a poco empecé a trabajar con jóvenes; algo que me dije nunca haría y que, como suele pasarme, terminé haciendo. Y es que la vida da muchas (MUCHAS) vueltas. El caso es que, los últimos tres años de mi vida los he dedicado a trabajar con jóvenes y eso significa establecer relaciones de amistad y cuidar de ellos como adolescentes/pre-adolescentes/jóvenes adultos y sus espíritus. En ocasiones resulta bastante duro ver cómo algunos toman decisiones que van a hacerles daño y no puedes hacer nada. Otras veces, en cambio, ves cómo toman decisiones que cambiarán sus vidas y las de otros a su alrededor de forma positiva. Y en ese momento te sientes orgulloso de que has podido, de alguna manera, formar parte de ese proceso; que Dios te ha usado para que otra persona esté bien. Y eso es lo que me sucedió este fin de semana pasado.
Seis jóvenes de Xtrem han decidido dar el paso del bautismo; un paso simbólico en el que públicamente expresan su deseo de seguir a Cristo.
Dos de ellos fueron bautizados este domingo pasado. Erica, Guille, Tamy y yo estuvimos presentes en el evento que además de hacernos reir, nos hizo soltar alguna lágrima al no poder evitar pensar que esos chicos han crecido espiritualmente junto a nosotros y que, de la misma manera hemos estado con ellos antes de tomar ese paso, seguiremos con ellos después de hacerlo.
Quizá uno de los motivos por los que me han impactado estos bautismos es porque me pidieron que entrara a las aguas para bautizar, junto a su padre, a una de nuestras chicas. A Lizzy. Para mí fue un sentimiento de responsabilidad y de felicidad desbordante muy difíciles de describir. Sólo me he sentido así cuando me pidieron si podía ser el padrino de Hunter y de Hailey, los maravillosos niños de mi buen amigo Chuck.
Bajar a las aguas con ella significa que no sólo ella significa mucho para mí sino que además doy fe de que entiende lo que hace y que además estoy junto a ella en este testimonio público de que entrega su vida a Dios.
Kevin (izq), Lizzy (centro) y yo (dcha).Es para mí un gran honor haber podido estar ahí en ese momento tan especial para ella, su familia y su iglesia y, de la misma manera, seguiré ahí para sus malos momentos. Y para los demás chicos. Este pequeño gesto paga, con creces, todo el trabajo de estos años. Gracias Señor por oportunidades como estas que me recuerdan lo que hago en tu nombre.
Guille, Lizzy, yo, Jonathan y Erica.
Namasté my friends.